Hoy comparto un corto pensamiento del científico estadounidense, Benjamin Franklin: "Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo, involúcrame y lo aprendo".
En numerosas ocasiones, como educadores nos enfocamos en cubrir ciertos temas y tareas en un tiempo determinado. A veces olvidamos partir del conocimiento previo, olvidando que a través de la experiencia podemos obtener un aprendizaje más concreto y permanente.
El estudiante de hoy es un estudiante más tecnológico, éste va evolucionando a la par con la tecnología, creando con ésto una dependencia silenciosa de la mísma.
Esto de una forma u otra nos obliga a la contínua búsqueda de información, a la autoeducación y a involucrarnos dentro del mundo que ellos conocen. La educación de hoy no puede estar limitada y/o enfocada en libros y largas horas de lecturas y teorías... La educación de hoy tiene que ser más concreta, llena experiencias, donde el estudiante esté continuamente involucrado en la búsqueda y construcción de de su propio conocimiento. Convirtiendo entonces el proceso de enseñanza-aprendizaje, en uno más agradable y lleno de experiencias concretas que de una manera u otra harán del aprendizaje uno más permanente.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario